Doña Calma Gastrobar, Sanlúcar de Barrameda, Cádiz.
Hoy visitamos Doña Calma Gastrobar en Sanlúcar de Barrameda, un lugar que rápidamente se está convirtiendo en una joya gastronómica de la región. Desde el momento en que cruzamos la puerta, fuimos recibidos con una atención exquisita, y la animada concurrencia de clientes nos hizo sentir que habíamos llegado a un lugar realmente especial.
Nuestra aventura culinaria comenzó con las croquetas de carabineros, que fueron una auténtica delicia. Cada bocado era una explosión de sabor, con una textura cremosa por dentro y perfectamente crujiente por fuera. Estas croquetas establecieron un estándar muy alto para el resto de la comida.
El siguiente plato fue la ropa vieja de corvina. Este plato tradicional, con su mezcla de sabores ricos y complejos, estaba tan bien elaborado que dejó una impresión duradera. La corvina estaba cocinada a la perfección, y los ingredientes se complementaban de manera excepcional, resultando en un sabor inolvidable que evocaba la esencia misma de la cocina andaluza.
Luego, nos aventuramos a probar el taco de langostino, una propuesta original que nos sorprendió gratamente. Este plato fusiona influencias internacionales con ingredientes locales, creando un bocado lleno de sabor y frescura. Los langostinos estaban jugosos y bien sazonados, y el taco en su conjunto era una armonía de texturas y sabores.
Para finalizar nuestra degustación, opté por un clásico que siempre pruebo en cada establecimiento: la ensaladilla rusa. En Doña Calma, este plato se sirve con gambas que no se esconden, asegurando que el sabor del mar esté presente en cada bocado. La cremosidad de la ensaladilla combinada con la frescura y el sabor de las gambas la convirtió en un final perfecto para nuestra experiencia culinaria.
Un aspecto destacable de Doña Calma Gastrobar es su relación calidad-precio. Con un presupuesto de aproximadamente 20 a 25 euros por persona, se puede disfrutar de varios de los puntos fuertes de la carta sin ningún problema. Esta accesibilidad financiera no sacrifica en absoluto la calidad de la experiencia gastronómica, lo que lo convierte en una opción atractiva tanto para locales como para visitantes.
Cada plato en Doña Calma Gastrobar es una prueba de la dedicación y la habilidad de su equipo culinario. Desde las croquetas de carabineros hasta la ensaladilla rusa con gambas, cada bocado fue una celebración de la buena comida y la creatividad en la cocina. Recomiendo encarecidamente este lugar a todos los amantes de la gastronomía que busquen una experiencia única y deliciosa en Sanlúcar de Barrameda.
Puntuación (1-5)
Atención 5
Elaboración 5
Situación 4
Precio 4
Ensaladilla 4